Fax Press Madrid
La Asamblea Nacional francesa autorizó la realización de pruebas genéticas para evitar fraudes en la reagrupación familiar de inmigrantes. La medida, procedente de la Unión por el Movimiento Popular que lidera el presidente, Nicolás Sarkozy, ha sido planteada como una prueba más de la dureza del jefe del Estado galo en su intención de frenar la inmigración irregular. Sin embargo, en España ya se realizan estas pruebas desde hace al menos un año y para casos determinados en los que un inmigrante quiere traer a sus familiares al país de acogida.Este proceso fue confirmado ayer por la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, que explicó que las pruebas genéticas se realizan "con algunos países del África subsahariana" y en algunas situaciones ante las dificultades de documentación "que acrediten que esas personas que dicen ser hijos lo sean". Según el Ministerio de Exteriores y de Cooperación, estos exámenes genéticos se hacen únicamente con dos países, China y Nigeria, a través de los consulados españoles en Pekín y Shangai para el primer caso, y Lagos para el segundo. Sin embargo, Exteriores informó de que otras delegaciones diplomáticas españolas ya están estudiando aplicar esta medida, en concreto la embajada de España en Dakar, que a su vez tiene circunscripción consular sobre cinco países subsaharianos aparte de Senegal (Gambia, Guinea Conakry, Guinea Bissau, Sierra Leona y Cabo Verde). Esta petición de examen genético está en estudio, habida cuenta de que todos ellos son destacados puntos emisores de la inmigración irregular que llega en cayuco o patera a las costas españolas.
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