En Madrid se ha creado una plataforma para los inmigrantes emprendedores: la Plataforma Inmipymes, una iniciativa patrocinada por la Consejería de Inmigración de la Comunidad de Madrid. Esta entidad organiza jornadas formativas para explicar a los extranjeros que viven en España cómo montar un negocio, cuáles son los trámites que es preciso realizar, las obligaciones legales y fiscales, etc. Está siendo interesante pues se muestran casos reales de personas que lo han conseguido. En la última convocatoria, celebrada en mayo, empresarios de origen chino, rumano, latinoamericano… explicaron a los presentes su experiencia al constituir una empresa en este país.
La Plataforma Inmipymes ha realizado una peculiar folleto, la Guía práctica para el inmigrante que quiere ser empresario. Contiene un capítulo titulado Tipos de actividad donde se habla de la franquicia. La redacción de ese capítulo no ha sido muy afortunada puesto que otros tipos de actividad son: autónomo, sociedad limitada (SL), cooperativa, comunidad de vienes…
En mi opinión, esa clasificación no se ajusta a la realidad, pues se están mezclando conceptos. Por ejemplo, autónomo es un régimen especial de la Seguridad Social en el que cotizan empresarios individuales y administradores de empresas, mientras que SL o cooperativa son formas jurídicas que pueden tomar las empresas. Concretamente, la franquicia es un tipo de contrato mercantil que se firma entre dos partes: franquiciador y franquiciado, empresarios que pueden haber elegido diferentes opciones legales para crear su negocio. Por tanto, un franquiciado necesita crear una empresa. Puede ser empresario individual y, por tanto, una persona física, pero también puede crear una empresa con forma jurídica: sociedad limitada, cooperativa, sociedad anónima, etc.
Este folleto, del que se han editado 50.000 ejemplares que se repartirán en 500 puntos estratégicos, como locutorios, embajadas, consulados o asociaciones, tiene otras informaciones de interés para el emprendedor extranjero. Pero a mí me ha llamado la atención especialmente un glosario con algunas palabras clave, traducidas a diversos idiomas: árabe, chino, rumano, inglés, francés… Es un detalle curioso a la par que interesante. Es posible descargar la guía en formato PDF en Plataforma Inmipymes.
La Plataforma Inmipymes ha realizado una peculiar folleto, la Guía práctica para el inmigrante que quiere ser empresario. Contiene un capítulo titulado Tipos de actividad donde se habla de la franquicia. La redacción de ese capítulo no ha sido muy afortunada puesto que otros tipos de actividad son: autónomo, sociedad limitada (SL), cooperativa, comunidad de vienes…
En mi opinión, esa clasificación no se ajusta a la realidad, pues se están mezclando conceptos. Por ejemplo, autónomo es un régimen especial de la Seguridad Social en el que cotizan empresarios individuales y administradores de empresas, mientras que SL o cooperativa son formas jurídicas que pueden tomar las empresas. Concretamente, la franquicia es un tipo de contrato mercantil que se firma entre dos partes: franquiciador y franquiciado, empresarios que pueden haber elegido diferentes opciones legales para crear su negocio. Por tanto, un franquiciado necesita crear una empresa. Puede ser empresario individual y, por tanto, una persona física, pero también puede crear una empresa con forma jurídica: sociedad limitada, cooperativa, sociedad anónima, etc.
Este folleto, del que se han editado 50.000 ejemplares que se repartirán en 500 puntos estratégicos, como locutorios, embajadas, consulados o asociaciones, tiene otras informaciones de interés para el emprendedor extranjero. Pero a mí me ha llamado la atención especialmente un glosario con algunas palabras clave, traducidas a diversos idiomas: árabe, chino, rumano, inglés, francés… Es un detalle curioso a la par que interesante. Es posible descargar la guía en formato PDF en Plataforma Inmipymes.
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